No me gusta el colegio
No me gusta el colegio No me gusta el colegio. Y entonces sale un iluminado de entre el público que dice 'Y a mí sí, no te jode'. Pues sí. No me gusta el colegio. El gobierno no quiere que lo sepamos, pero yo os lo digo: los colegios son cárceles. Para disimular, dejan a los chavales vestir a su bola o con uniformes relativamente bonitos, pero la estructura educativa de nuestro país, y en general, está basada en las cárceles. Esto parece una idea alocada, pero ¡confiad en mí!, todo tiene sentido. Para empezar, en los colegios hay capataces. No niego que algunos profesores tengan pasión por enseñar, y pasión por lo que enseñan... pero algunos son seres humanos profundamente insatisfechos en su vida que se desfogan con el primer inocente que pillan. No tienen sentimientos, y si te tienen que joder, lo hacen con una sonrisa odiosa. ¿Por qué? Porque están amargados. ¿No puedo ser pintor? Profesor de dibujo. ¿No puedo ser químico? Profesor de química. Tiene gracia. Los presos,...